Los bateeiros muestran su malestar por la precaución que se les pide ante la escasez sin permitirles actuar en zonas en las que «sempre se traballou»
10 ene 2023 . Actualizado a las 04:52 h.El mar no estaba en buenas condiciones, las mareas no eran las más adecuadas, pero, aun así, fueron muchos los mejilloneros que dedicaron la mañana de ayer a inspeccionar las zonas de costa en las que tienen autorizada la extracción de mejilla. Las bateas, sobre todo en la ría de Arousa, están vacías. Las cuerdas colectoras apenas han logrado captar cría este año, así que las piedras son la última esperanza. Y no parece que sea esta demasiado brillante: «Non hai cría», explicaba ayer, exasperado, un bateeiro arousano. Este año la campaña ha comenzado más tarde de lo habitual, ya que las intensas lluvias de diciembre provocaron un exceso de agua dulce que puede resultar nefasto para la mejilla.
Por eso, desde la Consellería do Mar se ha pedido precaución a los bateeiros a la hora de salir a por este producto, especialmente dada su escasez. Desde los muelles se recibe la recomendación con cierto enfado. Consideran que la Administración los ha colocado contra la espada y la pared al seguir sin permitirles trabajar en zonas «nas que sempre se traballou», lo que provoca nerviosismo entre los bateeiros.
