El Gobierno declara zona catastrófica la costa afectada por el vertido de pélets
SOMOS MAR
Aprobó también ayudas para los damnificados por el incendio forestal de Trabada y la planta de residuos industriales de As Somozas
05 mar 2024 . Actualizado a las 20:28 h.El Gobierno ha aprobado este martes ayudas para los damnificados por el incendio urbano que se produjo el pasado 22 de febrero en la ciudad de Valencia, para los afectados por la contaminación por pélets procedentes del mercante Toconao que sufrieron las costas de Galicia, Asturias y Cantabria en los primeros días de enero del 2024 y otras 57 emergencias de protección civil registradas desde el 25 de septiembre del 2023.
El Consejo de Ministros ha declarado zonas afectadas gravemente por una emergencia de protección civil (Zaepc) los territorios afectados por esos episodios catastróficos, que provocaron daños personales, en infraestructuras y en bienes públicos y privados, así como daños en masas forestales, cultivos, arenales y explotaciones agropecuarias, polígonos industriales y otras instalaciones productivas, perjuicios «de tal magnitud que justifican la aprobación de ayudas estatales basadas en el principio de solidaridad interterritorial y con carácter subsidiario y complementario a las actuaciones que, en ejercicio de sus competencias, tienen encomendadas las Administraciones territoriales», explica el Ministerio del Interior en un comunicado.
En esas emergencias se incluye «el vertido de pélets frente a las costas de Portugal y su posterior llegada y dispersión por las playas de Galicia, Asturias y Canarias en los primeros días del 2024». Pero no es el único episodio catastrófico que ha afectado a Galicia. Se incluye en la declaración el incendio forestal que afectó a Trabada (Lugo) y otro que requirió la activación de una situación operativa por riesgo químico, que fue el fuego originado en la planta de residuos industriales en As Somozas (A Coruña).
Esta declaración permite que el Estado pueda otorgar ayudas «sin necesidad de disponer de una evaluación de daños, a la vista de la información disponible». Entre esos subsidios, cuya concesión corresponde al Ministerio del Interior, figuran ayudas a los titulares de establecimientos industriales, mercantiles y de servicios, incluidos los agrarios, marítimo-pesqueros y turísticos (hasta 9.224 euros) y a corporaciones locales por gastos derivados de actuaciones inaplazables (entre el 50% y el 100% del coste, según los casos).
Asimismo, el acuerdo aprobado por el Consejo de Ministros abre la posibilidad de adoptar otras medidas de apoyo, como beneficios fiscales en el impuesto sobre bienes inmuebles (IBI) o la cuota del impuesto sobre actividades económicas (IAE) que corresponden a los receptores de estas ayudas, que como es habitual estarán exentas del IRPF; medidas laborales y de Seguridad Social, como exenciones de las cuotas, y ayudas a los concellos para reparar instalaciones o reponer infraestructuras públicas.
Reacción tardía
La solicitud de declaración de zona catastrófica fue solicitada por la Xunta en el apogeo del vertido de pélets, que ayer criticó la demora del Gobierno: «Chama a atención que o Goberno tome estas decisións 19 meses despois dos incendios forestais do verán do 2022 e tres meses despois do incidente do buque Toconao», explicaron fuentes de la Consellería do Mar. Explican, asimismo, que la Xunta pagó en pocas semanas las ayudas a los damnificados por los incendios y que contrató hasta 400 profesionales para limpiar las playas «mentres o Goberno central desatendía a súa función de loita contra a contaminación marítima». Por tanto, esa declaración de zona catastrófica y la habilitación do del fondo de contingencia «é un recoñecemento, moi tardío, de que o Goberno central non fixo o seu traballo cando debía».
En el caso del vertido del Toconao, «a Xunta analizará polo miúdo o acordo do Consello de Ministros e agarda que ampare as perdas económicas sufridas polos mariscadores nos últimos meses e que contribúa a reparar o desprestixio ao sector que determinados partidos políticos provocaron por causas electorais», concluyen.