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El cerco prueba a levantar el precio de la anchoa con el cambio de reglas pactado

Somos Mar REDACCIÓN / LA VOZ

SOMOS MAR

CARMELA QUEIJEIRO

La limitación de volúmenes por grupo de barcos no influiría en un futuro reparto por buque de la especie

13 mar 2025 . Actualizado a las 04:45 h.

La flota del cerco del Cantábrico Noroeste regresó el martes de Madrid con «un reparto que non é reparto», como explicaron fuentes del sector. Es reparto, porque es una «limitación de volúmenes de captura por grupo de barcos», apuntan sobre una fórmula recogida en el artículo 15 de la Ley de Pesca Sostenible e Investigación Pesquera que ya se probó con la gamba roja del Mediterráneo. Y no es reparto porque, como recoge esa misma normativa, «los criterios que reglamentariamente se establezcan (...) no podrán tomarse en consideración en los futuros repartos de posibilidades de pesca que se realizaren sobre esas especies». Así que la base sobre la que este año se asignará a cada organización de productores pesqueros (OPP) el volumen de anchoa que corresponden a los barcos que la integran —un 80 % en base las capturas históricas, un 10 % por GT del buque y un 10 % por número de tripulantes de los últimos cuatro años (2021-2024)— no tendrá por qué ser la regla que rija si en el futuro hay un reparto.

Opescantábrico, la principal impulsora del consenso que se alcanzó el martes en la Secretaría General de Pesca, defiende que se trata de probar una nueva fórmula de gestión para levantar el precio de la anchoa, que está por los suelos. «Estáse a pagar o bocarte a medias por debaixo de un euro» expone un armador de cerco— «e iso é porque se descarga tanto á vez que incluso colapsan as lonxas, e porque se descarga moito pequeno porque a xente non vai buscar o grande, que está a máis millas da costa». Asignando cuota por OPP, se pretende que cada organización gestione la parte que le corresponde de la forma que considere más provechosa.

Aunque la orden ministerial que regulará esa nueva fórmula no estará lista hasta dentro de un par de meses, el consumo que ahora están haciendo los barcos se descontará de lo que le corresponda a la organización a la que pertenece. Queda por determinar la gestión que harán los que no están adscritos a una OPP, para los que la Administración ha reservado el 10 % del cupo total. Opescantábrico acapara el 90 %, a pesar de representar el 94 % del consumo. Precisamente por eso hay escépticos del sistema: «Se quen xestionan o 94 % non foron capaces de impor medidas, van selo agora?», plantean.