Mar y Pesca esperan que la Comisión valore el impacto social y económico del recorte de cuotas y lo suavice
PESCA Y MARISQUEO
Quintana recalca que la UE «necesita producir alimentos de proteína mariña e non depender tanto» de otros países
06 nov 2021 . Actualizado a las 04:55 h.Todavía son propuestas los recortes de cupos que propone la Comisión Europea para el 2022 en especies tan importantes para la flota del caladero nacional como la merluza, el lenguado, el jurel o el abadejo. Complicarían las economías de los pescadores y las posibilidades de compra de los consumidores. A la flota no le gustan, pero tampoco a Rosa Quintana, conselleira do Mar, cuyo departamento prepara informes para recordarle que además de proteger a los recursos debe cuidar a quienes viven de ellos.
También en el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación opinan que el equipo del eurocomisario Virginijus Sinkevicius parece haber olvidado otros aspectos esenciales en la gestión pesquera comunitaria cuando plantea reducir las posibilidades de capturas. A través de agencias como Efe y Europa Press, desde el departamento español que preside Luis Planas creen que la Comisión «tampoco tiene en consideración el efecto social, económico y de empleo».
La conselleira Quintana se pronunció públicamente ayer en Xantar Ourense, el Salón Internacional de Turismo Gastronómico, donde Mar realiza una intensa promoción de los productos del mar gallegos. Será a mediados de diciembre cuando el Consejo de Ministros de Pesca de la UE decida sobre las cuotas para el 2022 de las especies cuya gestión no comparte con Reino Unido o con Noruega. Y ahí, con el ministerio español, pretende hacer valer informes sobre el impacto en la economía gallega de los recortes. Que la flota «poida seguir sendo operativa» depende del equilibrio entre los consejos científicos y la rentabilidad.
La titular de Mar confía en que la Comisión y los euroministros, «tendo en conta tamén os aspectos social e económico, compensen o esforzo moi especial da frota comunitaria para axustar» sus capturas al rendimiento máximo sostenible, ese que «permite un futuro saludable» para los peces y los pescadores, ya logrado en 62 de las 78 poblaciones. Y Quintana cree que debe atenuarse el recorte porque la UE «necesita producir alimentos de proteína mariña e non depender tanto de frotas como pode ser a asiática».
