Los arrastreros portugueses ya no podrán descargar en Galicia los fines de semana
PESCA Y MARISQUEO
La igualdad de normas a partir del 1 de enero incluye prohibirles faenar con tren de bolos
17 dic 2021 . Actualizado a las 11:09 h.Después de años de protestas porque los arrastreros de fondo de Portugal jugaban con ventaja respecto a los de Galicia al poder descargar y vender sus capturas durante los fines de semana, a partir del 1 de enero se igualan las condiciones entre las dos flotas. Medio año ha pasado desde que el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, y el ministro del Mar portugués, Ricardo Serrao, firmaron en Luxemburgo la solución a una reivindicación de la flota gallega y del resto del Cantábrico. Pesqueros lusos, varios de capital español, les llevaban la delantera porque introducían el pescado en los mercados antes que ellos, obligados a parar sábados y domingos. Por la normativa portuguesa, sus barcos sí continuarán faenando los fines de semana.
El acuerdo hispano-luso acaba de ser ratificado por las Cortes españolas, concluyendo así el procedimiento que permitirá aplicarlo en España, en principio durante cinco años, prorrogables por dos más, explican desde Pesca en un comunicado. Las nuevas condiciones para los pesqueros españoles y portugueses que faenan en aguas limítrofes de los dos países «permiten una mejor gestión de los recursos, así como dar estabilidad a las flotas», señalan desde el Gobierno español.
Además de la regulación del horario de desembarque, de acuerdo a los horarios marcados por la legislación de cada país, a partir de enero los portugueses tampoco podrán emplear el controvertido tren de bolos en aguas españolas, donde desde hace años está prohibido ese sistema que salvaguarda las redes en fondos rocosos, dañándolos y permitiendo pescar en espacios próximos a la costa donde operan barcos con otras artes.
Portugueses y españoles tienen la opción de desembarcar sus capturas en puertos de cualquiera de los países, «con independencia de donde vaya a realizarse posteriormente la primera venta», explican desde el ministerio español. Obviamente, deberán pagar las tasas donde descarguen y acompañar las capturas con un documento de transporte hasta el lugar donde comercialicen el pescado. El acuerdo incluye la armonización de medidas de gestión, como la veda biológica para el arrastre en otoño en el golfo de Cádiz, así como el mantenimiento de las principales posibilidades de pesca con el mismo número de licencias para ambas flotas, tanto en las aguas continentales como en las de los acuerdos fronterizos del Miño y el Guadiana.
Además, España y Portugal refuerzan la coordinación e intercambio de información entre ambas partes para el seguimiento de la actividad pesquera de las flotas en las aguas de la otra parte. Estas medidas dan respuesta a las demandas del sector español, especialmente a la flota de arrastre del noroeste español y las de cerco y arrastre del Golfo de Cádiz, que reivindicaban «un acuerdo estable, duradero y en igualdad de condiciones con la flota del país vecino», añade el comunicado de Pesca.