Los topes de anchoa dividen a las flotas gallega y vasca en el inicio de la costera

El puerto de Portosín registra desde hace varios días una intensa actividad, porque una decena de tripulaciones del cerco ponen a punto los barcos para zarpar, entre hoy y mañana, con destino a las aguas del Cantábrico. El próximo martes arranca la costera de la anchoa, y lo hace con discrepancias entre las flotas gallega y vasca sobre los topes de capturas.

Para los pesqueros con doce tripulantes la cuota se ha establecido en 10.000 kilos diarios, que se reduce a 8.000 en el caso de los que tienen menos. Sin embargo, el vocal de Acerga y responsable del cerco en la cofradía de Portosín, Eduardo Carreño, explica que la asociación gallega propuso inicialmente un máximo de 6.000 y 4.500 kilos, que elevó a 8.000 y 6.500 con el ánimo de alcanzar un acuerdo.

El motivo de abogar por menos cupo, señala Eduardo Carreño, es que en inicio de la campaña alcanza poco valor: «Será pequeña e irá para patés. Es una vergüenza echar anchoa a tierra por menos de un euro». Señala que el año pasado «algunos barcos la vendieron al principio a 0,16 euros. Los vascos la comercializaban a 0,75 porque tenían el mínimo de retirada».

Pesca responsable

El armador Eduardo Carreño se muestra contundente al manifestar que «abogan por una pesca responsable y están poniendo topes de capturas muy elevados para el principio de la costera».

Asegura que detrás de esta medida hay una intención clara: «Quieren acabar con el 80 o 90 % de la cuota del primer semestre para ir después al bonito. Les da igual el precio al que se ponga en tierra el pescado».

Indica que «ellos defienden el reparto de la cuota por históricos. Quieren quedarse con un porcentaje grande, como hicieron con la xarda».

La flota de Portosín prevé compaginar la captura de la anchoa con la del verdel, que ya está abierto, y también coger jurel. Inicialmente, los barcos permanecerán en el Cantábrico hasta principios o mediados del mes de junio, cuando regresarán de nuevo a Galicia para iniciar la campaña de la sardina. Sin embargo, Carreño indica que habrá que aguardar qué cupos hay para esta última.

Sobre la zona de trabajo, señala que posiblemente la anchoa de mayor tamaño puede encontrarse en la franja de Gijón, Avilés y San Vicente de la Barquera. Por el contrario, cree que la más pequeña estará hacia el este. Recalcó que «iremos donde esté el grueso de la flota».

Esta especie constituye ahora el principal objetivo de las embarcaciones. En el caso del verdel, Carreño subrayó que ahora es demasiado pronto, pese a que ya puede capturarse: «Suele venir a mediados de marzo».

La decena de barcos de Portosín que emprenderán rumbo este fin de semana comenzaron con los preparativos el miércoles. El objetivo era tenerlo todo a punto, tanto pertrechos como víveres y otros elementos para el ejercicio de la actividad.

La costera constituye una parte muy importante para los cerqueros. Cabe señalar que la flota de Portosín es la de mayor importancia de Galicia. Con el paso del tiempo, y debido a las limitaciones con los cupos, cada vez son más prolongados los períodos en los que estos pesqueros faenan en el Cantábrico.

Las limitaciones en las capturas de sardina también han tenido un impacto decisivo en su trabajo.

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