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Benigno Fraga, un referente en la pesca del bou a mediados del siglo XX

josé pino

PESCA Y MARISQUEO

ARCHIVO JOSÉ PINO

De Portocelo, fue uno de los mejores patrones de pesca de España

25 mar 2022 . Actualizado a las 22:16 h.

Benigno Fraga Pico nació en la parroquia xovense de Portocelo el 19 de noviembre de 1902, el mayor de quince hermanos en una familia de labradores, y se crio con su abuela materna viuda María Ben hasta los nueve años en que sus padres se trasladan al burgo de San Cristóbal. En una época que solo ofertaba campo o mar, Benigno se inscribió en el Registro Marítimo de Viveiro y con la libreta de navegación en mano recién cumplidos los dieciocho años marcha a Gijón en busca de trabajo con su amigo y vecino Nicasio Otero «Tecedor».

El período entre los años 1920 y 1921 los hace de marinero enrolado en el vapor Gloria, de 3.550 TRB de la Naviera Vascongada, que cubre la línea de Gijón a la bahía carbonera galesa de Cardiff. Más tarde, en 1922, se incorpora al Servicio Militar en Ferrol. Al finalizar en 1925, regresa a Gijón donde pasa por el Gloria, el Enrique Ballesteros y el Ramón de Bikuña, un pailebote de 3.500 toneladas de carga de la Naviera Bidasoa antes de dar el salto a la pesca.

CEDIDA POR ANDRÉS G.

La exitosa vida marinera de Fraga

En junio de 1926 embarca de marinero en el bou gijonés Cimadevilla (31 metros 170 TRB) de S. Fernández. Benigno Fraga es un joven avispado, trabajador y con conocimientos de cordelería que se tropieza con uno de los mejores patrones de pesca, el gallego Mariño, cuya fama ya proviene de las pioneras parejas gijonesas de vapor Tarragona-Gerona de Manuel Artasánchez, junto a los Chimbos de Monasterio y los Charlestones de Jaime Seguí. En 1912 se disuelve la sociedad de Miguel Pérez y Ángel Ojeda; la viuda de éste pone en manos de Justo y sus hermanos la empresa que, aprovechando la coyuntura de la Primera Guerra Mundial, crece a partir de su pareja Melquíades-Azkárate. En 1926 traen dos bous ingleses comprados en Francia: el Musel (ex Stratherrick ex Les Barges de 1898, 31 metros 210 TRB), que en 1952 Hijos de Ángel Ojeda convierte en mercante, y el Apagador (ex Cairntoul ex La Banche de 1902, 34 metros 210 TRB), vendido en 1962 a Santander y desguazado en 1972.

En octubre de 1927, Justo Ojeda ficha a Mariño de pesca para el bou Musel llevándose con él a Fraga de contramaestre. Durante el siglo pasado hasta la creación de las titulaciones superiores de pesca, en los bous y bacaladeros ostentaban el mando capitanes o pilotos de la Marina Mercante, los patrones de pesca llegaban al cargo desde contramaestre, hombre de confianza con gran dominio de las redes y aparejos al que el patrón le acababa transmitiendo su conocimiento de los caladeros y zonas de pesca. Solo dos años después, el 20 de noviembre de 1929 en Bilbao, con 27 años recién cumplidos, Ojeda da a un instruido Fraga el mando del Musel (patrón de bou era una élite de veteranos) que además acaba de conseguir el título de Patrón de Cabotaje de Primera Clase Vapor de Cabo Higuer a Río Miño. Sus buenos resultados en las playas cantábricas hacen que Jesús García Castillo le contrate para pescar en el Malenchu (ex Balsamine de 1922, 32 metros 211 TRB).Lo hará de 1931 a 1934. Para entonces, Benigno Fraga se ha labrado una reputación de pescador que hacen a Justo Ojeda requerir sus servicios y blindarle en la compañía con un buen contrato.

En septiembre de 1934, en Erandio, toma el mando del Apagador capitán Francisco Ansoleaga, con el que hará tándem durante una década. Estalla la Guerra Civil y el Apagador, incautado en el fondeo de la ría de Viveiro, pasa a engrosar la flotilla nacional con base en Ferrol como barreminas. La casa Ojeda consigue habilitar el bou Los Pozos (31 metros 177 TRB) para suministrar pescado a la población gijonesa y no ser movilizado por la República. De 1936 a 1939 estará patroneado por Fraga, pero al ser tomada Asturias por los nacionales será arrestado por colaboracionista.

Estreno del primer bou diésel

Al término de la contienda regresa al Apagador, para entonces su fama le precede siendo el baluarte en que se asienta la compañía Hijos de Ángel Ojeda. En mayo de 1945 estrena el primer bou diésel de Ojeda, el Costa Cantábrica (46 metros 488 TRB Deutz 725 HP). En la marea siguiente estrena su gemelo, el Costa Canaria, que será su barco emblema y donde adquirirá gran fama en Cádiz siendo uno de los pioneros a Cabo Blanco y en invierno al sur del Sáhara y Mauritania. En junio de 1954, el Costa Cantábrica se hunde al oeste de Nuadibú al embestirlo el mercante francés Louis L.D.; perecen 15 hombres incluido su amigo y relevo, el patrón Manuel Piedad. En 1962 estrena el flamante Costa Cantábrica (51.40 metros 493 TRB Atlas-Polar 960 HP), de Astilleros Astano-Fene, el bou gallego de Ojeda construido como respuesta a la serie Lemos de Pescanova que trabajará en el banco canario sahariano hasta 1967 en que se destina a pareja al bacalao en Terranova. De vuelta al Costa Canaria hasta septiembre del año 1968. cuando preparando los trámites para su jubilación cerca de los 66 años, en un viaje Gijón-Cádiz sufre un accidente en el puerto del Ronquillo, bajando a Sevilla, donde fallece.

El altar de la iglesia de San Tirso en Portocelo (Xove)

Cumplidas tres décadas de mar, Fraga había pescado en todos los caladeros con los rigores propios de tiempos bélicos: en la Guerra Civil fue encarcelado en Ferrol siendo revocado su procesamiento por finalizar la contienda, en 1942 al mando del bou Marcelina Ciriza (post Costa Montañesa) esquivó hábilmente una mina al norte de Llanes, que recuperaron y remolcaron para que explosionara el patrullero Uad-Martin al norte de Gijón, durante la Segunda Guerra Mundial fueron ametrallados por la aviación en Gran Sol y Francia. En 1957 en agradecimiento y devoción a la Virgen de Fátima, encarga al artista vivariense José Otero Gorrita el altar y la imagen que luce hoy en recuerdo de la familia Fraga Alonso, en la iglesia sita en Vilachá.