Recomiendan retomar en el 2025 la veda mensual en aguas francesas para proteger delfines
PESCA Y MARISQUEO
El Gobierno somete a información pública ayudas por un millón para aliviar el parón del pasado invierno, mientras que la flota ve las subvenciones insuficientes
28 jun 2024 . Actualizado a las 05:00 h.El Grupo de Alto Nivel sobre las Aguas Suroccidentales ha formulado una recomendación conjunta en la que propone retomar el año que viene la veda de 30 días en aguas jurisdiccionales francesas del Atlántico (subzona CIEM 8 a, b, c, d) para proteger a los pequeños cetáceos. El Comité Científico, Técnico y Económico de la Pesca (STEFC, por sus siglas en inglés) será el encargado de resolver sobre esta propuesta de cierre temporal, que Francia adoptó en el 2024 de forma unilateral, causando controversia y afectando de forma total o parcial a alrededor de 40 buques españoles.
La recomendación pasa por cerrar a la pesca desde el 22 de enero hasta el 20 de febrero del 2025 las aguas francesas hasta el límite exterior de la zona económica exclusiva de Francia, dentro de la subzona CIEM 8. Durante ese período, los buques de más de ocho metros que utilicen redes de arrastre pelágico, arrastre demersal a la pareja, redes de cerco con jareta, redes de enmalle y trasmallos no podrán faenar en el mencionado caladero.
El informe justificativo de esta medida resalta que desde el año 2017, y especialmente entre diciembre y abril, se han observado en la costa atlántica francesa «varamientos masivos» de mamíferos marinos. En los doce meses del 2023 se registraron 1.570 incidencias, 1.490 de ellas durante el invierno. En el 2022 fueron 688, por 838 en el 2021, 1.204 en el curso de la pandemia y 1.073 en el 2019.
En cuanto al litoral español de la zona CIEM 8 c, hubo 456 varamientos en esos cinco años.
El documento admite el impacto socioeconómico de la medida adoptada entre enero y febrero de este año por el Gobierno galo. En Francia, la pérdida de ingresos de los pescadores se estima en unos 18 millones de euros. En cuanto a la flota española, se contabilizan 37 barcos afectados —cerqueros, pero también volanteros y parejas de arrastreros—, aunque 20 pudieron faenar en otros caladeros y 17 tuvieron que amarrar, por falta de cuota o de permisos para pescar en zonas alternativas. El Gobierno estimaba que casi la mitad tenían puerto base en Galicia.
Nueve buques de Puerto de Celeiro tuvieron entonces que desplazarse a la zona 7 j, en el sur de Irlanda. De salir adelante la veda en el 2025, ocurrirá lo mismo. «Coa delicada situación do sector, as empresas non poden soportar unha parada», explica el jefe de flota, Suso Lourido.
El pasado 25 de junio, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (Mapa) sometió a información pública —el 15 de julio termina el plazo de alegaciones— la orden por la que se establecen las bases reguladoras de las ayudas a los armadores afectados por el parón de este curso.
El documento establece que la financiación de estas ayudas se efectuará con cargo a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) del 2024 asignados al Mapa, con una dotación de 1.004.277 euros. Podrán beneficiarse de las subvenciones buques de cerco, arrastre de fondo a la pareja, cerco, artes menores de enmalle y enredo, volanta y rasco que tengan autorizaciones para faenar en el citado caladero francés. El período mínimo de días consecutivos de paralización temporal de la actividad para tener acceso a la bonificación se fija en 20 días durante la veda, y las jornadas máximas subvencionables en 22.
Salvo desplazamientos por seguridad o participación en fiestas tradicionales, «durante los días subvencionables el barco debe permanecer en puerto», señala.
La agrupación de armadores de Celeiro considera que las ayudas económicas del Gobierno no son suficientes como para plantearse otra opción que emigrar a otros caladeros durante el mes de veda. El patrón mayor de Burela y presidente de la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores (FNCP), Basilio Otero, coincide en el análisis y recuerda que el Gobierno francés ha indemnizado a los arrastreros con el 80 % de los ingresos perdidos y a los rederos y almadraberos con el 85 %.