El segundo pelotón del Celta regresa a casa con buenas sensaciones. Recuperando la presión, la posesión del balón y la querencia por las contras. Levantó además un gol en contra a las primeras de cambio, el tercero que encadena el Celta en las tres últimas jornadas. Al final rescató un punto, que no garantiza el play off e incluso se ve soprepasado por dos rivales en la table, pero que puede ayudar para el futuro inmediato. Ese es el camino para pensar que todo es posible.
Sin embargo, el partido no comenzó de la mejor manera. Los hechos confirman que no es cuestión de meter más defensas. La historia también se repitió para el Celta de los tres centrales. Primera llegada del Salamanca, y única del primer tiempo, y gol charro. Encontrando un agujero negro entre Túñez y Sergio Ortega para cabecear a la red.
El golpe, tempranero como los últimos, llegó después de que el Celta hubiese desperdiciado un gol cantado. El Salamanca no salió tan fiero como se presuponía, y a las primeras de cambio permitió una contra de Aspas que el moañés falló incomprensiblemente.
Hubiese sido el momento de los celestes, pero con el marcador a favor Balta regaló el balón al rival, y aunque el cuadro celeste monopolizó el esférico, apenas complicó a Biel Rivas. De hecho, las dos ocasiones creadas, diáfanas por otra parte, no cogieron portería. Ni Michu y Aspas acertaron.
El Salamanca, con un partido tan plácido quiso enseñar los dientes en el arranque del segundo tiempo, pero fue Aspas quien sacó el empate de la nada. Cobrando una falta, golpeándola y encontrándose con la colaboración del meta local.
A los charros no le quedó más remedio que arriesgar y Michu pudo dar un golpe de gracia tras un servicio de Aspas que se fue al limbo. Poco después fue el asturiano quien estuvo cerca de nuevo. Eran los mejores minutos del cuadro gallego.
Como los dos querían, el partido se abrió, y del tostón del primer acto se pasó al intercambio de golpes. Yoel sacó un remate de Kike, Lago se metió en la cocina. La balanza estaba abierta pero la inclinación, por juego, presión y dominio, era de los celestes.
En la recta final, con la cita fraccionada Herrera buscó el triunfo con De Lucas y Papadopoulos, pero tampoco hubo oportunidades. Los dos equipos pactaron unas tablas nada despreciables a estas alturas. Ahora queda la asignatura del Rayo.
Goles: 1-0, min 11: Perico. 1-1, min 49: Aspas.
Árbitro: Bernabé García (Murcia). Amarilla a Juanpa, Moratón por los locales y a Abalo, Mallo, Murillo y Ortega por los vigueses.
Incidencias: Estadio el Helmántico, ante unos 7.882 espectadores.
Biel Rivas; Juanpa, Goikoetxea, Moratón, Sito Castro; Yuste, Zamora; Perico (Sarmiento, min 65), Toti, Kike López; y
Yoel; Hugo Mallo, Murillo, Ortega, Túñez, Lago; Bustos, Garai, Michu (De Lucas, min 76); Dani Abalo (Joan Tomás, min 43) y Aspas (Papadopoulos, min 82).