A Casa Rodante, donde personas con parálisis venden piezas de artesanía únicas, abre en A Laxe

Begoña Rodríguez Sotelino
b. r. sotelino VIGO / LA VOZ

VIGO

Xoán Carlos Gil

La firma que nació en los talleres de Apamp vuela sola y tras la web, acaba de inaugurar espacio físico en el centro comercial

21 jul 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

No es fácil creer una marca, montar una empresa, poner en marcha un proyecto, fidelizar a un público objetivo. No lo es nunca, pero más cuando implica a un grupo de personas con parálisis cerebral. No porque encuentren más inconvenientes, sino porque la determinación es imparable, como se demuestra con el proyecto artístico A Casa Rodante, auspiciado por la asociación Apamp (Asociación de familias y personas con parálisis cerebral). La idea bajó a rebolos el año pasado, con éxito a velocidad vertiginosa de fibra óptica. Pero en modo virtual, con tienda alojada en su página web.

Ayer estrenaron espacio físico, un local para ver y tocar a ritmo pausado las creaciones de las personas con parálisis cerebral sobre cuyos diseños realizan piezas de una originalidad apabullante. Se llama Espazo Rodante y está en el local número 10 de la planta baja del Centro Comercial A Laxe «grazas á colaboración de Zona Franca de Vigo», destacan.

Recordaba sobre su gestación la gerente de la Asociación de Personas con Parálisis Cerebral, Conchi Somoza, que A Casa Rodante nació en un rincón del escaparate del centro de día que tienen en la zona de A Florida (Miguel Hernández, 1), donde exponían los primeros frutos de sus labores en un taller de cerámica y de macramé. Y pese a ese orgullo de cuna, lo que quiere la asociación es que la marca vuele sola, que nadie crea que solo son trabajos manuales que hacen personas con capacidades diferentes como terapia, que sí lo es, pero sus piezas de artesanía de alta calidad son únicas y por tanto, no son baratijas de mercadillo. De hecho, el proyecto arrancó cuando se atrevieron a hacer la pregunta del millón, que requiere un encaje y una reflexión: ¿la gente les compraba cosas porque les gustaba el producto, o por las personas que los fabricaban? Y no esperaron a la respuesta, porque sabían cuál era la que querían escuchar: «Que lo hagan porque le gusta», reconoce Somoza.

En la inauguración de ayer estaban buena parte de los creadores, usuarios de Apamp y sus familias, en un momento de fiesta y regocijo, con actuación musical incluida (a cargo del grupo Paraíso Canto) para celebrar la nueva etapa que se abre para todos ellos. El Espazo Rodante es, además, un lugar de encuentro para todos los artesanos y los amantes de los objetos irrepetibles. La marca está acreditada por el sello Artesanía de Galicia, a cuya fundación pertenecen desde hace más de dos décadas.

En los talleres de Apamp facturan productos de serigrafía, cerámica, grabado, cestería, papel hecho a mano, cartón piedra, textil y encuadernación. Según explica, se trata de una labor colectiva en la que participa un equipo de sesenta personas junto a cada uno de los ocho artesanos especialistas al lado de ellos. Juntos planifican los proyectos o piezas que vayan a hacer.

Entre las más célebres están los engendros, unos muñecos de trapo con formas imposibles. La marca gallega de moda Bimba y Lola también ha colaborado con Apamp vendiendo en exclusiva 42 piezas de trece de sus usuarios artistas y están en marcha nuevas colaboraciones.

La tienda de A Laxe estaba ayer de fiesta, pero desde hoy está abierta al público. Lo hará en horario de lunes a viernes, de 10.00 a 14.00 horas.