La plataforma Augas Limpas y vecinos denuncian los efectos contaminantes de la masificación de barcos en Arneles y autocaravanas en Vilariño; el Concello de Cangas dice que habrá multas
11 ago 2024 . Actualizado a las 05:00 h.En los últimos años no hay influencer, personaje popular, medio de comunicación o instagrammer con más o menos seguidores que haya podido sustraerse a la tentación de contarle al mundo las bondades de las playas de O Morrazo, y en particular las de Aldán. Fruto de esa necesidad de bocachancla es la actual saturación de la zona, que ha pasado de paraíso caribeño a pesadilla vecinal.
Hace un lustro comenzó a hacerse insoportable por vía terrestre, invadiendo carreteras de tráfico rodado en vías incapaces de asumir una densidad que cada verano se multiplica por diez. Tras ellos, y atraídos también por reclamos como el megayate de Amancio Ortega, que teniendo los siete mares por delante sigue empeñado en clavarse frente a la playa de Arneles, llegaron los imitadores. Hace unos días, la plataforma Augas Limpas denunciaba la masificación de este pequeño arenal en el que se contabilizaban más de 80 barcos fondeados sin ningún tipo de control, rebasando incluso el espacio de atraque con riesgo para los bañistas.
A mediados del mes de julio iniciaban desde Augas Limpas una campaña informativa y de denuncia colocando carteles por las zonas afectadas, alertando de la contaminación de aguas fecales en la ría del Aldán derivada de los vertidos de residuos desde las embarcaciones.
Debido al derramamiento de basura de todo tipo, desde restos de comida a desechos de productos de higiene íntima, han tomado nota de lo que flota sobre las transparentes aguas turquesas, que es espuma sobre una superficie sospechosamente aceitosa en el agua de un mar cada vez más turbio.
Por otra parte, los vecinos de la playa contigua, Vilariño, llevan varios años reclamando al Concello de Cangas que se ponga coto al aparcamiento libre e impune de decenas de autocaravanas que se quedan instaladas durante todo el verano en una vía pública que no está acondicionada para ello. «Se quedan aquí semanas y vacían por los alrededores sus aguas negras, sin contar que otros hacen sus necesidades directamente entre las dunas, que están llenas de excrementos y papel higiénico, es una auténtica porquería», clama una mujer que reside a pocos metros de una hilera infinita de autocaravanas con ropa tendida, duchas portátiles y capachos con cacharros de cocina que se lavan a pie de playa.
Al respecto, el Concello de Cangas responde a través de su alcaldesa, Araceli Gestido (BNG), que el uso de la lámina de agua es competencia de Costas, «pero a inspección e control é competencia de Capitanía Marítima e o Concello solicitoulles que haxa maior coordinación entre administracións para controlar o correcto uso da mesma».
Indica, además, que el municipio tramita anualmente la propuesta de balizamiento «para que informen sobre as distancias e configuración das canles de entrada». Gestido argumenta que «fóra do balizamento, o Concello non ten competencia, pero colabora activamente tanto coas capitanías de Vigo e Marín-Pontevedra, así como co servizo provincial de Costas, notificando incidencias como embarcacións amarradas ao balizamento, como incumplimientos na navegación dentro da zona reservada aos bañistas».
Problema de insalubridad
En cuanto al problema de salubridad que generan las autocaravanas sin control, subraya que están trabajando en la elaboración de una regulación municipal. «De todos modos, queremos recordar que as verteduras deste tipo no medio natural son consideradas infraccións graves e levan aparelladas multas desde 901 euros ata 45.000 euros, ou desde 9.001 euros ata 300.000 euros de tratarse de residuos peligrosos». La regidora de Cangas aclara que las sanciones las pueden aplicar «tanto os vixiantes de Costas, pois é unha area que está nunha zona de dominio publico maritimo-terrestre, como mesmo o Seprona, así como tamén a Guarda Civil e a Policía Local».
Araceli Gestido indica, además, que en esa zona de la playa de Vilariño, al estar en ámbito maritimo-terrestre, «xa non se pode pernoctar, pero aínda así imos reforzar esa prohibición mediante a instalación de sinalización que llo lembre ós usuarios, que se vexan tentados a asentarse na zona durante varios días».