Dos años de cárcel para un conductor novel con TDAH que embistió mortalmente a una joven motorista en Vigo

E. V. PITA VIGO / LA VOZ

NIGRÁN

Oscar Vázquez

La jueza dijo que el implicado «omitió los más elementales deberes de cuidado y la creación de un riesgo grave y evitable»

21 dic 2024 . Actualizado a las 01:56 h.

Un conductor novel que había sacado varios días antes su carné conducir ha sido condenado a dos años de cárcel por causar la muerte de una motorista de 29 años en un accidente de tráfico tras invadir el carril de la víctima en una mañana de julio del 2023 en una carretera de Vigo a Nigrán. El implicado perderá su carné de conducir durante cuatro años. El implicado omitió informar al psicotécnico de que padecía un trastorno de déficit de atención con hiperactividad (TDAH) que le obligaba a medicarse pero el Juzgado de lo Penal número 2 de Vigo le resta importancia porque tal trastorno no le impedía conducir. Las aseguradoras abonaron más de 110.000 euros a la familia de la fallecida.

La jueza recordó unas palabras del Tribunal Supremo: «Desatendió, hasta niveles intolerables, claras, accesibles y fácilmente atendibles normas y señales de tráfico que prohibían específicamente la peligrosa maniobra realizada». En este caso, «la actuación del acusado, penetrando en el carril contrario, en un tramo recto, y con una evidente línea continua, que separaba ambos carriles, invadiendo el carril contrario al suyo por el que circulaba la motocicleta, implica la omisión de los más elementales deberes de cuidado y la creación de un riesgo grave y evitable».

El implicado conducía un Volvo S80, propiedad de una familiar, en dirección a Vigo. La vía, que conecta Nigrán con Vigo, por la que circulaba el acusado cuenta con dos carriles de circulación, uno en cada sentido, separados por una doble línea continua. El lugar el accidente fue el punto kilométrico 3.500, un tramo recto, a nivel, con firme en buen estado y una velocidad máxima autorizada de 70 km/h. El acusado invadió de manera lenta y paulatina el carril destinado a la circulación sentido Nigrán, manteniendo la velocidad constante, de 70 km/h aproximadamente, y embistió frontalmente contra la motocicleta SYM Fiddle 125, que circulaba correctamente. La motorista, de 29 años, intentó frenar para evitar la colisión y girar hacia la izquierda, dejando una huella de frenada de 8 metros. Dado lo sorpresivo de la maniobra, no pudo evitar ser embestida por el frontal delantero izquierdo del vehículo del acusado.

La jueza ve probado que el implicado no realizó maniobra alguna para evitar la colisión y tras el impacto continuó circulando hasta rebasar una isleta en sentido contrario y chocar contra una señal de tráfico, hasta que se detuvo.

 La aseguradora abonó 83.749 euros a cada uno de los padres de la fallecida por el perjuicio personal básico y daño emergente, otros 22.793 euros para su hermano y otros 5.848 por gastos de entierro y funeral.

El acusado dijo en el juicio que se mareó. Este se apeó del coche y habló con los dos testigos, que lo vieron nervioso mientras repetía «no la vi, no la vi» o se justificaba: «Se vino encima mía».