João Assunçao cambia su taller del Orzán a Cuatro Caminos

Yago Gantes
Yago Gantes LA VOZ

VIVIR A CORUÑA

Joao Assuncao, propietario de un taller de bicicletas en la calle Posse, 14, A Coruña.
Joao Assuncao, propietario de un taller de bicicletas en la calle Posse, 14, A Coruña. EDUARDO PEREZ

Su negocio de venta y reparación de bicicletas comienza una nueva etapa en la calle Posse, número 14

19 nov 2023 . Actualizado a las 10:07 h.

Que una zona de la ciudad se ponga de moda implica, irremediablemente, que suban los precios del alquiler. Eso es lo que ha sucedido al nuevo Orzán, ese que está entre la plaza Pontevedra y la Iglesia Castrense de San Andrés. Y lo que ha obligado a João Assunçao, dueño de un taller de bicicletas, a marcharse a Cuatro Caminos. «Al final del contrato me iban a subir el alquiler al doble, me parecía mucho dinero», explica. Una postura que desdice la propietaria del bajo, que asegura que el contrato de arrendamiento «le fue comunicado con más de un año de antelación». 

El cambio de domicilio es la crónica de una muerte anunciada que comenzó en el 2015. João, de 55 años, cuenta que cuando decidió dejar su trabajo en márketing digital y convertirse en su propio jefe, apostó por un local céntrico y pequeño. La elección fue en la calle Vista, una zona de la ciudad que por esa época estaba tratando de decir adiós a los botellones, presencia de toxicómanos y por las quejas vecinales por la práctica de la prostitución. 

En ese momento ya sabía que el bajo era pequeño y que tenía humedades. Sin embargo, siempre asumió que la inversión iba a ser ajustada. «Cuando decidí emprender, tenía claro que la empresa tenía que depender de mí», asegura. La decisión fue buena porque el taller de João sigue en activo y con una clientela fiel. 

El actual cambio de ubicación se lo toma además como algo positivo porque gana en espacio. «Vine para aquí porque me gustó el local, buscaba un determinado precio por metro cuadrado, algo que me encajase para dar un servicio de mejor calidad», cuenta. Quiere avanzar en otra de las líneas de negocio, la venta de bicicletas a medida: «El cliente puede decidir cualquier elemento del vehículo. Hacemos bicis desde 1.200 euros hasta el presupuesto que se quiera»

Licenciado en ciencias empresariales, está orgulloso del día en que apostó por emprender por sí mismo. «Estaba casando de trabajar para los demás, y decidí montar mi propio negocio como mi padre», cuenta. «Empecé a echar cuentas, hice plan de negocio, busqué local y me animé», recuerda. Como consejo a aquellos que estén valorando hacer lo mismo, dice que lo mejor es pedir el menor dinero prestado y siempre estar al frente de todo. 

Eso lo dice con la convicción que él lo sigue haciendo, pues aunque ya recibe a clientes en el establecimiento de la calle Posse, todavía está atareado con llamadas con proveedores, ultimando las obras y resolviendo problemas. «Aquí apenas tengo la ayuda de mi suegro», dice.