Tres terminales están ya adaptadas a la alta velocidad: Vigo, Pontevedra y A Gudiña. Las de Ourense, Santiago, A Coruña y Lugo se ejecutarán cuando la línea esté en pleno funcionamiento
19 jun 2021 . Actualizado a las 20:31 h.Cuando a finales de año se termine la línea de alta velocidad a Galicia, tan solo habrá tres estaciones totalmente adaptadas a la nueva era ferroviaria. Una es la más grande de Galicia, la de Vigo, con un gran centro comercial que corona las vías subterráneas en el emplazamiento de la antigua estación de Urzaiz. La terminal viguesa será inaugurada en septiembre. Otra es la de Pontevedra, remodelada y adaptada a los servicios de alta velocidad con la entrada en servicio de todo el eje atlántico en el 2015. También está casi lista Porta de Galicia, en A Gudiña, concebida para dar servicio a una amplia zona rural y la única construida desde cero en los márgenes de la línea de alta velocidad. Las obras serán recepcionadas en unos días, explica el ADIF, y la terminal se encuentra en pruebas para su conexión con la red.
Los trenes podrán llegar de igual manera a las estaciones sin necesidad de remodelarlas demasiado. Lo prioritario en estos diez últimos años era terminar el nuevo acceso ferroviario central. El esfuerzo presupuestario fue ímprobo y se dejó para más adelante la modernización de las estaciones de las principales ciudades, que contarán con terminales de autobuses adosadas -que construye la Xunta- para convertirlas en nodos intermodales y acercar así a más gente -sobre todo de las áreas rurales- a los nuevos servicios ferroviarios rápidos. Así, los edificios de viajeros de Ourense, Santiago A Coruña y Lugo comenzarán a modernizarse cuando la línea de alta velocidad esté en pleno funcionamiento, aunque el retraso en el nuevo material rodante hará que los tiempos más competitivos se consigan en una segunda fase. Esta es la situación actual de los proyectos para estas terminales.
Ourense
Una estación más modesta para un centro neurálgico. Una vez descartado el proyecto del arquitecto británico Norman Foster por su alto coste (cerca de 70 millones de euros), en febrero se aprobó el estudio informativo de la intermodal ourensana, cuya terminal de autobuses empezó a funcionar provisionalmente en febrero. No habrá grandes actuaciones en el edificio de viajeros, pero sí se reformará la playa de vías y los andenes para facilitar el reparto de viajeros al resto de las ciudades gallegas, pues Ourense será en una primera fase la única a la que podrán llegar los genuinos trenes AVE. Este proyecto incluye una actuación urbanística similar a la lograda en Santiago con la pasarela que conecta el barrio de Pontepedriña con el resto de la ciudad. Así, se trata de mejorar la permeabilidad peatonal entre los dos barrios ourensanos separados por las vías y, además de la pasarela, se cubrirá parte de la playa de vías. El nuevo aparcamiento subterráneo se terminará en breve.
Santiago
Un proyecto ambicioso para la capital. La presidenta del ADIF, Isabel Pardo de Vera, presentó ayer en Santiago el proyecto para la nueva terminal ferroviaria, después de que hace unos días se pusiera en servicio la moderna estación de autobuses que se sitúa al otro lado de las vías y que se conecta por medio de una gran pasarela. El proyecto del edificio de viajeros se adjudicará en breve (fue licitado por 33,5 millones). La futura estación intermodal de Santiago tendrá 3,5 millones de viajeros en el 2025, de los cuales 2,6 se moverán por el eje atlántico y 0,9 millones hacia la nueva línea de alta velocidad, en la que ya están interesados operadores privados, confirmó Pardo de Vera. El nuevo edificio de viajeros se construirá elevado sobre las vías, al lado de la estación actual, integrándose con la pasarela recién inaugurada y salvando el desnivel actual con una amplia antesala.
A Coruña
Avances en una de las que arrastra más retraso. A finales de mayo, el Ayuntamiento, la Xunta y el ADIF firmaban el convenio que podrá dar el impulso a la reforma de la terminal ferroviaria y la construcción de la nueva estación de autobuses que formarán el futuro complejo intermodal. Lógicamente se respetará la nobleza y belleza del edificio original neorrománico de Antonio Gascué Echeverría, una obra única en el panorama ferroviario español. Se construirá una nueva marquesina para los andenes y una pasarela peatonal que favorecerá el intercambio con la terminal de autobuses. Este complejo intermodal recibirá 2,8 millones de viajeros en el 2025, un millón más que ahora.
Lugo
Pendiente de un acuerdo próximo. Esta estación está en fase de redacción de proyecto, después de que se desbloquearan las negociaciones entre administraciones, que firmarán un acuerdo en breve. Tendrá un nuevo aparcamiento, sobre cuya cubierta se construirá la nueva terminal de autobuses. Ambas podrían edificarse paralelamente. El proyecto incluye un paso peatonal bajo la estación para hacer permeables las vías.