Alfonso Sobrado Palomares recibió el agradecimiento de los vecinos de Calvos de Randín

Este sábado se cumplió en Calvos de Randín aquello de que nunca es tarde si la dicha es buena. El escritor y periodista Alfonso Sobrado Palomares, nacido en 1935 en la aldea de Paradela de este municipio ourensano, pudo por fin recoger la medalla y el pergamino que le reconoce como hijo predilecto. El nombramiento era una decisión tomada antes de la pandemia pero esa circunstancia, junto con un problema de salud del propio Palomares, fueron posponiendo ese reconocimiento de los vecinos a un hombre que aunque ha recorrido buena parte del mundo y ha compartido tiempo con mandatarios nacionales e internacionales, nunca olvidó sus raíces. Tampoco lo hizo ayer en sus palabras de agradecimiento, recordando emocionado aquella infancia en la pequeña aldea en la que no había electricidad. El regidor, Aquilino Valencia destacó precisamente ese lazo mantenido siempre con sus orígenes, le agradeció la donación de su biblioteca y destacó su trayectoria en defensa de unos valores que, dijo, se están perdiendo en la sociedad actual.

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