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Europa se da una nueva oportunidad para hacer despegar su acuicultura

espe abuín REDACCIÓN / LA VOZ

ACUICULTURA

CARMELA QUEIJEIRO

La Comisión plantea crear un órgano de asistencia a los Estados miembros

31 ene 2022 . Actualizado a las 12:24 h.

La acuicultura en el mundo crece a un ritmo endiablado. Por encima de cualquier otra forma de producción de proteína animal. A un ritmo medio del 2,5 % anual en las últimas tres décadas, según cifras ofrecidas por la patronal española Apromar en su último informe. Pero ese incremento no es regular. Europa se queda rezagada. Observa impotente cómo regiones y países le pasan por delante, a pesar de todo el empeño que ha depositado durante años en hacer despegar este sector. Esfuerzos titánicos que han acabado en un pírrico aumento del 3% en un decenio, de acuerdo con los datos que la socialista Clara Aguilera ofreció la semana pasada semana en la Comisión de Pesca de la Eurocámara. Ella es la ponente del informe sobre las directrices que acaba de lanzar la Comisión Europea para dar el impulso definitivo a una actividad con un gran potencial para generar riqueza, reforzar la seguridad y soberanía alimentaria, y avanzar hacia ese sistema de producción de alimentos sostenible y neutro en carbono que persigue Europa con su Pacto Verde y su estrategia De la Granja a la Mesa. Un documento que arrancó elogios de los demás eurodiputados, algunos de los cuales aún tenían presente el que se hizo hace 4 años para lo mismo: potenciar la acuicultura en la UE.

Europa se ha dado una nueva oportunidad en ese sentido. Y ha elegido la senda de lo ecológico y sostenible en esta nueva tentativa. La pista de despegue se ha preparado añadiendo la A de acuicultura al Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (de FEMP a FEMPA). Fondos que se complementan con las directrices estratégicas para una acuicultura de la UE más sostenible y competitiva para el período 2021-2030, que pone deberes en forma de recomendaciones tanto al Ejecutivo comunitario, como a los Estados miembros, de paso, y al Consejo Consultivo de Acuicultura. Consejos que podría dar desde ese mecanismo de asistencia para la acuicultura de la UE que plantea crear y que serviría como una herramienta para ayudar a la Comisión, a los socios y al sector a adoptar buenas prácticas para enfilar bien la pista de despegue del sector.

Obstáculos que despejar

Ese documento es el que ha glosado Aguilera. Esta lo considera un buen punto de partida para corregir eso de que en Europa solo uno de cada cuatro productos del mar proceda de la acuicultura y que, además, el 70 % de las proteínas marinas que ingieren los europeos sean importadas. Ahora bien, los obstáculos están bien identificados y así lo ha plasmado la misma Comisión en su documento. No son otros que los que lleva años denunciando el sector en España, como son la falta de una planificación espacial a través de la ordenación del territorio y los espacios marinos, la ausencia de una normativa que proporcione seguridad jurídica y, sobre todo, disponer de una única entidad que reúna a las Administraciones públicas nacionales y regionales competentes en materia de acuicultura para agilizar la tramitación de proyectos. Esta última es, precisamente, una de las recomendaciones que el Ejecutivo hace a los Estados miembros.

Ahora bien, el sector también tiene que dar sus pasos, en especial en el ámbito de la investigación y la innovación para lograr, por una parte, reducir su dependencia de los piensos y aceites de pescado con fuentes de alimentación alternativas o el cultivo de especies vegetarianas y también para minimizar el uso de antibióticos y antimicrobianos preferiblemente a través de la mejora de la calidad de las aguas.

En este sentido, Aguilera pidió flexibilidad para la acuicultura ecológica, a la que se le exige una alimentación que hoy no está disponible, por lo que plantea que se le permita volver a emplear un 30% de piensos no ecológicos.

Buenos ojos para el marisqueo y las algas por raptar CO2

Tras años invisible, el marisqueo y las mariscadoras ha sido todo un descubrimiento para la Comisión Europea. En sus directrices recoge que tanto el cultivo de moluscos como el de algas tienen «un gran potencial para mitigar el cambio climático», con su poder de secuestrar carbono y de adaptación climática. Incluso aplaude la cría en estanques y humedales, pues todos ellos proporcionan protección contra los efectos de la mutación del clima. Por tanto, «debe fomentarse este tipo de acuicultura».

En este aspecto, Aguilera planteó a la Comisión que estudie la posibilidad de incluir la acuicultura en el sistema de derechos de emisión y en el Mecanismo de Ajuste en Frontera por Emisiones de Carbono de la Unión para incentivar a la industria a descarbonizarse garantizando que competirá en igualdad de condiciones.