La idea de convertir el recinto de prisiones en hotel cobró impulso durante los meses de junio y julio del año 2009, cuando la Unesco declaró el faro como patrimonio de la humanidad.
En la capital lucense hay 14 tramos por eliminar y solo han comenzado las obras en cuatro, con lo que los trabajos no estarán acabados para cuando se abra la modernizada línea de ferrocarril a Ourense