«Queremos que los niños sean adultos muy pronto, y es peligroso», advierte el autor de «Niñ@s híper». Este es el retrato de una generación muy competente pero frágil, hiperconectada, adicta al estímulo, con más conocimientos que experiencias. «Hemos poblado el universo infantil de gadgets que aplastan la curiosidad», asegura
Ana Abelenda